Cómo almacenar los champiñones correctamente para que duren más

Producto recomendado

Seta shimeji blanca ecológica Taeq 150g

Seta shimeji blanca ecológica Taeq 150g

Botón de entrega de Pão de Açúcar

Las setas han sido parte de nuestra cocina durante milenios y el hombre las ha utilizado como alimento durante al menos 13.000 años. Además de encontrarse en casi todos los continentes, sus variaciones comestibles son muchas, lo que permite diferentes combinaciones que harán que los platos no solo sean más sabrosos sino también saludables. El único problema es que tienen una vida útil corta, pero esto se puede eludir si sabe cómo almacenarlos, aumentando su durabilidad sin perder nutrientes.

El almacenamiento se puede realizar de diferentes formas

En primer lugar, hay que decir que hay más de una forma de almacenar las setas, así que quizás debas probarlas hasta que sepas cuál te conviene más. Además, si los compraste en el mercado, la forma de conservarlos es una, y si ganaste o recolectaste uno salvaje, es otra. Por lo tanto, tenga cuidado de no tener que tirarlos simplemente porque se han echado a perder.

En primer lugar, cabe mencionar que las setas absorben mucha agua, y que si pretendes almacenarlas durante mucho tiempo lo ideal es sacar la mayor cantidad de líquido posible. Si optaste por utilizar setas silvestres esta regla no se aplica, ya que lo ideal es comerlas pronto. Con eso en mente, recopile solo lo que va a usar en unos días. Aquí, es importante que se mantengan húmedos, ya que esto solo determinará el período en el que se pueden usar. Para mantenerlos en estas condiciones durante una semana, simplemente colóquelos en una bolsa de papel y guárdelos en el cajón del refrigerador sin cerrar la abertura por completo. No olvide estar absolutamente seguro de que los hongos son comestibles, ya que hay muchas especies tóxicas que pueden confundirse con otras que no lo son.

Si desea mantener frescos los champiñones que compró en el mercado durante mucho tiempo, es una buena idea congelarlos. Pero ten en cuenta que cuando los saques del congelador deben estar listos para su consumo. Por lo tanto, es importante decidir de antemano para qué se utilizarán antes de prepararlos para la congelación. Una de las opciones es cocinarlos, algo que les permite durar hasta seis meses. Si el hongo en sí es muy grande, puedes cortarlo en dos o incluso en cuatro. Recordando que si no está completo, el tiempo de preparación es mayor. Y si no quiere que cambien de color, remójelos previamente durante cinco minutos en jugo de limón. Luego simplemente cocínelos durante unos cuatro minutos, déjelos enfriar, séquelos bien y solo luego empáquelos en una bolsa de plástico o en una olla cerrada y póngalos en el congelador.

Otra opción es freírlos, pero en este caso su durabilidad es menor. Hay dos formas de hacerlo aquí. La primera es simplemente poner las setas en la sartén con un poco de mantequilla, esperar a que se enfríen y luego guardarlas. En ese caso, debe permanecer fresco durante aproximadamente tres meses. La segunda opción es dejarlo sazonado, lo que lo hace aún más listo para el consumo, pero su durabilidad se reduce a menos de una semana. En este caso, primero debes cortar el hongo en trozos pequeños y colocarlos en una sartén con cebolla y mantequilla. Luego, simplemente agregue las hierbas que desee y congele toda la mezcla al final. Esta opción es perfecta para quienes quieran hacer una crema con las setas, siempre y cuando sea pronto, claro.

Los champiñones deshidratantes es ideal para aquellos que quieren deshacerse de la nevera.

Ahora, si no quieres saber sobre el refrigerador, existe el método de deshidratar el hongo. Para ello tendrás que ponerlo en algún lugar que lo seque, ya que sin agua tardan mucho más en pudrirse. El primer paso es limpiarlo por completo, pero sin utilizar ningún líquido. Luego, puede elegir el método que prefiera para que el agua se evapore por completo.

Sepa que es posible utilizar el horno en este proceso, pero el fuego debe permanecer bajo y debe tener mucho cuidado de que no se quemen. Otra sugerencia es conectarlos mediante un cable y colgarlos para que se deshidraten de forma natural con la acción del viento. Recordando que este método no funciona en lugares húmedos, ¿vale? La última opción es colocarlos directamente al sol, pero asegúrate de que ningún animal, insecto o no, los toque, ya que esto puede contaminarlos. Recordando que los hongos deshidratados suelen durar hasta un año sin estropearse.

Los beneficios aumentan por especie

Sea cual sea el método que elijas, lo cierto es que tener una seta fresca siempre lista para comer es genial. Después de todo, este hongo comestible es una gran fuente de vitaminas, siendo muy rico en complejo B. Además, ofrece una alta concentración de minerales, como potasio, yodo, calcio y fósforo. Y dependiendo de la especie que elijas, los beneficios son aún mayores. El shitake, por ejemplo, es bueno para la presión arterial y aún puede considerarse un afrodisíaco. Paris, también conocido como champiñón, es rico en fibra y ayuda al buen funcionamiento del intestino. Finalmente, los porcini, o funghi secchi, ayudan a acelerar el metabolismo. ¡Y eso es solo por nombrar los hongos más famosos! Vale la pena experimentar con diferentes especies y agregarlas a tu menú diario para tener una dieta aún más equilibrada.

Recomendado

10 alimentos ricos en hierro que no puede faltar en su dieta
¿Para qué sirve la hoja de laurel? Descubre sus beneficios y como consumirlo
¿Para qué sirve la planta de ora-pro-nobis? 5 beneficios de esta verdura